Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2015

Si quieres viajar en el tiempo, vete a Kiev

No hace falta encontrar un portal dimensional para ir al pasado. Viajar ahora a Kiev es darle la vuelta al reloj y poner fecha de hace treinta años en Europa (o más). Caminando por sus coloridas calles de ladrillos vistos, uno se pregunta si habrá espacio para esta gente entre las arias de Rachmaninov y la Unión Europea. Pero quizás sea esa paradoja casi irreconciliable lo que necesite el viejo continente: un electroshock del este que devuelva la vida a su enquilosado body. Puede que ambas se necesiten para sobrevivir al duro invierno.

Durmiendo en casa de Grabowski, el coleguita del Docktoro Esperanto

Observa bien en las ruinas donde te metes, porque cada casa tiene su historia. En mi caso, fue una grata sorpresa descubrir que mi ruinoso hostel de la calle Hoza de Varsovia, no era solo un bloque de viviendas con un serio problema de aluminosis. Sino el antiguo hogar de Antoni Grabowski, coleguita del Docktoro Esperanto (no es un supervillano, sino el inventor del esperanto). Y uno de los principales difusores de esta neolengua que pretendía convertirse en el idioma universal. A primera vista, parecía un edificio salido de una Batalla de Stalingrado en versión ciberpunk: las inquietantes grietas de su fachada, no quedaban nada disimuladas por los cientos de graffittis que colmaban cada centímetro de su descompuesta fachada. Pero el stencil de Iris, la jóven prostituta de Taxi Driver, debería haberme indicado que el lugar tenía algo de historia. Y la tenía: hace más de un siglo fue el hogar de Antoni Grabowski, el primer tipo que sostuvo una conversación en esperanto, con el f

Viaja a Gaza con Air Bansky

No queríamos dejar pasar más tiempo, sin compartir con vosotros el satírico y genial vídeo que ha hecho Bansky sobre su última visita a Gaza. Guiados por la mano de este forajido del aerosol podemos ver el panorama actual en la que se encuentra Palestina a través de la mirada corrosiva y ácida del pintor inglés. No tiene desperdicio, y es una auténtica llamada de atención sobre el poder del arte. Y sobre la responsabilidad que deberían tener los artistas en este mundo.