“En nuestro interconectado mundo, resulta difícil
creer que existan tribus no contactadas, pero sí: existen”. Así
de poderosa arranca la charla TEDX de Sarah Shenker, testigo de la ONG
Survival en las zonas donde residen los últimos indígenas aislados
del planeta. “Dejad a las tribus no contactadas”. Es el grito de
Sarah tras haber narrado los fatales efectos que observó en la
comunidad de yanomamis tras su contacto con un grupo de forestales.
Su testimonio es realmente impactante.
Survival se ha convertido en la voz y la defensa de los
indígenas desde los bosques fluviales del Amazonas a las planicies
áridas del Chaco (Paraguay), pasando por las paradisíacas islas
Adamán (India) y las islas de Papúa Nueva Guinea. Esta
organización, que nació en Londres en 1969, se ha convertido en el
representante en el mundo occidental de las reivindicaciones del
mundo indígena. El portavoz más firme de unos pueblos que se
enfrentan sistemáticamente a su desaparición.
Survival a la vanguardia
Sarah
Shanker pertenece a la ONG Survival; organización pionera en la
lucha de los derechos de los no-contactados. Nacida en 1969, se ha
convertido en un movimiento global para salvaguardar los derechos de
los pueblos indígenas y tribales. “Las sociedades industrializadas
someten a los pueblos indígenas y tribales a una violencia genocida,
a la esclavitud y al racismo para poder arrebatarles sus tierras, sus
recursos y su mano de obra en nombre del 'progreso' o la
civilización”, escribe Survival como declaración de principios.
Sus cuatro décadas de vida, le han consolidado como el canal
principal para encauzar la asfixiante situación de los pueblos
indígenas y los no-contactados.
Se están creando fuertes rozes entre las políticas de
conservación y las tribus indígenas,
Las últimas tribus no contactadas del planeta no son una
vía muerta para el 'desarrollo' de la civilización. Su conocimiento
de las selvas (la gran botica de nuestra farmacopea) les convierte en
un fuerte activo para la supervivencia de nuestra especie. Son
nuestro mejor puente con el medioambiente; son los guardianes de la
naturaleza. Como demuestran, por ejemplo, los sofisticados códigos
de algunas tribus del Amazonas para mantener el balance de su
ecosistema con la caza y la recolección de frutos. Mantener su
sabiduría puede marcar la diferencia mañana.
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