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Guía del comprador que pudo haber escapado a la palma

¡Por Gilgamesh! Todo lleva aceite de palma: los champús, las chocolatinas, la mantequilla… Quién no se ha sentido atrapado en un vórtice de inacción cada vez que va al supermercado e intenta comprar algo que no lleve aceite de palma. Es como el espíritu de todos los productos del supermercado. Sin embargo, muchas veces pasas por el pequeño badulaque de la esquina, y ya sea por la prisa o por estar pensando en tus movidas dejas de lado esa aguileña vigilancia que te define y te lanzas al primer paquete de choco que ves para saciar tu apetito. Ya no más, tendrás esas excusas gracias a este decálogo que te presentamos para sacar a la palma de tu vida. 



Si estás en la universidad o tienes resaca procura evitar los noodles de a euro a toda costa (lo sé es duro), evita también la mayoría de chocolatinas, los cereales, e incluso la mayoría de champús. Pero, hay otros productos cuanto más pérfidos en ese aspecto como viene a ser el diésel. ¿Sabías que la mitad de la palma que quemamos en la Unión Europea proviene de él? Por cada compra que hagas de estos productos, sufrirán las consecuencias las selvas tropicales del planeta y su fauna. Está en tus manos decrecer uno de las amenazas más flagrantes a las selvas del planeta. Conoce de primera mano a los 10 jinetes del palmgeddon.

10. Cheetos, Doritos, Walkers y Pringles
Las patatitas. Los snacks ligeros como las patatas industriales son uno de los principales productos en contener aceite de palma. Muchas veces lo verás aparecer bajo el seudónimo de Aceite vegetal. Así, que atento viajero: lo qué buscas, no siempre es evidente y puedes verte inmerso en una fútil investigación que no te revele a los siempre esquivos secretos de la palma.


        La industria del aceite de palma tira de todo tipo de recursos ilegales.

9. Comida rápida: Mac Donalds, Burguer King y Subway
Aquí, es donde la cosa se pone interesante. Donalds, BK, Pipzza Hut, el pollo frito de Kentucky y las demás franquicias fast food, utilizan la palma raudales. Un servidor ha estado a los mandos de la freidora en varios de ellos, y te puedo asegurar que las garrafas de óleo de palmito vuelan cosa mala. Eso sí, realmente la palma no es (ni de menos) lo más terrorífico que puedes encontrar en sus cocinas.


    Esto antes era un bosque tropical lleno de animales. Ahora es aceite de palma.

8. Fideos instantáneos: ¡apriétate el dolor!
¡Noooo! Renunciar a los fideos instantáneos sería algo que nadie en su sano juicio querría hacer. Son uno de los principales vehículos de la palma; que muchas veces encontrarás bajo el pseudónimo de alguno de sus derivados etiquetados como Glicerina o Sulfato de Lauryl Lactylale. Igualmente, deberías evitar los fideos instantáneos porque, realmente, son puro veneno a dosis de un pavo. Son el equivalente al pegamento en el mundo alimenticio.


        Los orangutanes en libertad no sobrevivirán para ver otro siglo. Casi seguro.

7. Bollería industrial: caballo de Troya de la palma
El negocio de la bollería industrial es uno de los principales escondrijos de la palma a nivel mundial. Tiene que haber algo chungo para que todo esos paquetes de Donuts, Donettes, Bollimierdas y otros derivados del gran horno de satán. Me he fijado que un buen truco para saber si el producto en cuestión lleva aceite de palma es fijarse si lleva un 50% de grasas saturadas. Entonces, es que lleva aceite de palma. Es un clásico. Es todo cuestión de estar ágil; de estar atento a la detección de la palma.


       El aceite de palma es barato, pero es un desastre ecológico.

6. Diesel: el fuel de la palma en nuestro mundo
¿Sabías que alrededor del 51% de todo el aceite de palma importado a Europa va directo a nuestros coches. La Unión Europea lo subsidiza como “biodiesel verde”. Aunque, actualmente, es 3 veces peor que el biodiesel debido a la deforestación que causa. Millones de acres de selva se han quemado para poder suplir la demanda de este combustible por parte de la UE.


    Las selvas tropicales de Borneo han desaparecido en un 98%. No hay más. 

5. Chocolate: esclavitud, expolio y palma
El chocolate se lleva la palma en cuanto a lo que productos sucios se trata. No solo es uno de los principales bastiones de la palma, sino que es uno de los bastiones de la explotación infantil en África. Los recolectores de cacao, ganan una media de 2 dólares al día. Lo que frecuentemente les lleva a utilizar mano de obra de niños para recortar gastos. Muchos niños de países como Sierra Leona o Costa de Márfil se ven obligados a trabajar en los campos para ayudar a sus padres, lo que deriva en prácticas cercanas a la esclavitud.


 El tema del cacao es otro mal rollo muy a tener en cuenta debido a sus practicas esclavistas.

4. Jabones, maquillaje, cremitas para las manos y demás
¿Quién te podría decir que esa cremita que utilizas para hidrate las manos iba a estar hecha con componentes traídos de una plantación de palma en Indonesia que ha matado a varios cientos de orangutanes. Jodido. Pérfido. Desde luego.  La industria de los cosméticos no solo se caracteriza por testear sus productos en monicacos y otros animales, sino que es uno de los principales usuarios del aceite de palma vía un derivado llamado Sodium Palmitae (Sodio de palmito).


      La palma la lía allá donde vá. Esta foto muestra un reciente derrame en la bahía de Hong Kong.

3. Bebidas gaseosas: también con palma
Lo realmente singular con el aceite de palma es ver cómo sus tentáculos están tan arraigados en nuestra vida que llegan a todas los productos de nuestro mundo. Coca-cola, Pepsi, Fanta, Sprite Seven up y Dr. Pepper. Pasando por alto su colorido y formas que lo mismo parecen un brebaje alienígena está el tema de sus altas concentraciones del mesocarpio de la palma.


La gente lo tiene muy claro en el mundo: se nos ha ido la mano con la palma.

2. Restaurantes: nunca lo hubiera dicho
Nunca lo hubiera dicho y sin embargo ahí están. Durante mis pesquisas personales, descubrí que 9 de cada 10 restaurantes de baja presupuesto (tales como chinos, tailandeses o bosnios) trabajaban con la palma en cuestión. Ahí, si que no tienes escapatoria y mucho de lo que toques va a contener al susodicho agente. Estarás entre la palma y la pared amigo. Una dura postura para aquellos que quieran escapar a la red de la palma.


       Las tribus indígenas son los que más pierden con la burbuja de la palma.


1. Las palomitas del cine: bajón total
Después, de varios meses haciendo uso de mis facultades detectivescas y conseguir bajar mi huella de palma a casi 0. Me encontré sentado en la cola de un cine, disfrutando de mi paquete de palomitas. Cual iba a ser mi sorpresa cuando un pensamiento se cruzó por mi mente: “Llevarán también palma estas palomitas, pensé”. Así que se me ocurrió preguntar. La respuesta no me pudo dejar más horrorizado. En efecto, llevaban palma también. Había cruzado la frontera hasta las sacrosantas salas de cine.


    Las cosas pintan realmente mal para los orangutanes, pero hay tiempo.

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