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Ya no hay vuelta atrás

Ya no llegamos. El chiringuito está a punto de echar la persiana y de despedir a los últimos bañistas antes de que el atardecer del Cambio Climático nos despida con sus últimos rayos cargados de carbono. El Panel Internacional del Cambio Climático avisa de que la Tierra ya no podrá recuperarse del CC por si sola. Habrá que poner de nuestra parte. Pero hay una solución totalmente ex machina para llevarnos todo el Co2 de la atmósfera y que el mundo vuelva a florecer. Desde árboles artificiales con hojas de metal, hasta cemento atrapa carbono, pasando por diésel hecho ‘artesanalmente’.



La comunidad científica avisa de que el punto de no retorno puede llegar a partir de 2035. A partir de allí, podemos presenciar el deshielo intermitente del Polo Norte en cualquier momento. Eso provocaría un desajuste en los océanos y un aumento de las catástrofes naturales. Ya hemos pasado el punto de no retorno en la concentración de Co2 en la atmósfera y se han activado una serie de mecanismos que acabarán por derritir los polos y desertizar las selvas. La única solución es absorber todo el Co2, ahora.

La industria de salvar al planeta
Luchar contra los efectos inmediatos del Cambio Climático generaría 30 trillones de dólares al año. Arreglar el planeta podría ser una de las industrias más productivas de la humanidad, daría trabajo a cientos de millones de personas y dejaría un hogar digno para las futuras generaciones. Ya se están creando nuevas e interesantes ideas para atrapar el Co2 de la atmósfera y liberarnos de los efectos del Cambio Climático. Desde árboles artificiales que absorberían el dióxido de carbono de la atmósfera hasta bloques de cemento que absorben el carbono de la atmósfera.


        
 El jardín mágico de Singapur cuenta con luminiscientes árboles atrapadores de Co2.


En el futuro, la tecnología lo cambiará todo. De momento, nos tendremos que conformar con ideas tan interesantes como un nuevo tipo de cemento que mimetiza a los corales marinos y que se absorbe dióxido de carbono. Pero, eso es solo la punta del iceberg de proyectos tan interesantes como Climeworks que monta gigantescas máquinas para absorber Co2 de la atmósfera o la increíble tecnología desarrollada por el estadounidense Departamento de Energía del Pacífico Norte (PNNL) han demostrado que es posible ‘cocinar’ Co2 y convertirlo en bloques de basalto gracias al efecto de la presión y el calor.  

Otro de los campos muy interesantes para luchar Contra el Cambio Climático es el mundo de las aplicaciones. Con apps como Oreoco, que te da la medida de cuánto dióxido de carbono estás gastando en tu actividades cuotidianas. Give 02, que registra cuanto gastas en tus viajes en coche o PaperKarma que te aconseja como ahorrar papel, es mucho más fácil recortar esas pulgadas de dióxido que acabarán por freírnos a todos vivos.

Los últimos minutos del partido
La Tierra se encuentra en sus minutos de descuento o en su prorroga propiamente dicha. Se calcula que para medidos de este siglo ya no va a haber hielo en el Polo norte. La Antártida, por ejemplo, ha registrado su mayor deshielo estacional en mil años. Groenlandia, por ejemplo, se está derritiendo a un ritmo acelerado. Desde hace 20 años pierde el equivalente de 110 millones de piscinas olímpicas durante cada año. Un deshielo masivo que puede acabar con los hielos de la mayor isla del mundo muy pronto.

     
      El deshielo de Groenlandia ya ha contribuido a aumentar 0.68 metros el nivel del mar.

Pero, ¿qué podríamos hacer a día de hoy para parar toda esta locura y salvar nuestro planeta? En primer lugar, habría que cortar toda emisión de combustibles fósiles: petróleo, gas natural y carbón. Si los sustituyéramos a medida de un 2% durante cada año por energías renovables, llegaríamos a los objetivos del Acuerdo de París en 2100. De momento, se esperá un aumento en la producción de petróleo del 60% hasta 2030 cuyo uso acabe probablemente con el hielo en el Polo Norte y traiga un escenario desconocido y francamente aterrador a nuestro planeta.

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